Es curioso que apareciese desde el subconsciente como título de mi anterior post. Debe ser que el otro día andaba buscando un nombre que evocase ciencia y seriedad para una empresa de marketing, y salió de alguna neurona melancólica. Rememoré el hospital que daba nombre, santo y seña a esta serie americana que provocó, al menos en Cataluña, una subida de vocaciones médicas entre los de mi generación. Yo no recuerdo al Dr Kildare, pero sí a Victor Erlik y a Wayne Fiscus, a la Doctora Cavanero (qué peaso de mujer me parecía), al odioso Dr Craig (la voz del doblaje de TV3 la compartía con ese otro ídolo, Thomas Magnum, el hombre que iba en Ferrari de gorra), a Denzel antes de ser un crack mediático,... La verdad es que no estaba tan lejos de la realidad que nos hubiese gustado vivir a todos los que nos metíamos en la Facultad de Medicina. Era la serie estrella -tras Dallas- de la TV3 emergente los domingos, antes de que el Dream Team diese contenido a los domingos de futbol culé, un tiempo en el que no me hubiese importado ser americano... no como ahora.
1 comentario:
¡¡¡Por fin un erudito televisivo!!! Pero dejaré para capítulos posteriores los seguimientos de las carreras de los diferentes componentes de St Elsewhere (por ejemplo, no hablas de David Morse como actor de reparto en La Roca, 12 monos o Bailando en la oscuridad robándole el dinero con el que la pobre Bjork pretendía pagar la operación de su hijo para que no quedara ciega como ella (esto es, un papel de villano de folletín tremendo). Habrá tiempo para todo...
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