Para qué explicar lo obvio... Unas palabrejas sobre lo cotidiano, desde la galaxia de los treinta, sin acritud (o no).
miércoles, julio 26, 2006
Fallen Angel in Spain, el angel caído del marketing
Hoy me he despertado escuchando en la radio que este video estilo bruja de Blair está causando furor. En realidad, el tiempo nos hará ver que la verdad está ahí afuera, en forma de pasta. La casualidad y el hecho mil veces probado que el mundo es muy pequeño ha hecho que una amiga de un amigo participe en el rollo y me llegara que esto forma parte de la nueva campaña de la marca Diesel. Es creatividad, pero probablemente los acojonados (que se vé lo están) habitantes de los alrededores de Campdevànol no se merezcan estar en el ojo del huracán... al menos gratis. En realidad la creatividad publicitaria requiere un marco cada vez más amplio y reconocido de relación con la nueva sociedad en la que nos movemos, pero el que quiera saber mas que trate con los expertos.
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7 comentarios:
Donde está la gracia? Si realmente que no tenga nada sentido ni conexión es lo que hay...
A mi em sembla brutal, ja l'havia vist feia dies i l'he anat passant als companys d feina, la veritat és que impacta...
A mi em mola!
Salut, Fredy!
Miki, es que la idea del último marketing es no dejar indiferente a nadie. Asociar un angel caído, un demonio, vamos, a unos tejanos ya viene de los 50, de Marlon Brando, de Elvis Presley, las reencarnaciones del mal cotidiano de la época. Dentro de nada espero ver un vídeo sobre la niña del exorcista anunciando antiácidos...
esto no es de un anuncio, solo hay que tener dos dedos de frente para darse cuenta, la amiga del amigo mas bien te a timado, creo yo vaya, sino donde estan los tejanos...o donde pone que es de la diesel...
El anónimo debe ver poco las noticias...
pues yo había visto este vídeo y en ningún momento vi ninguna conexión con Diesel. y de qué sirve hacer un viral si no sabes qué anuncia?
vale q si pienso q la campaña de ahora de Dieses salen ángeles... pero ufffff... una conexión muy lejana, no?
Hola, yo soy habitante de Campdevànol, y la verdad, no se dió mucho de hablar, tan solo era un chisme en el que se hablaban en los bares, nada mas... era pequeña cuando sucedio pero lo recuerdo bien, y nadie estaba asustado.
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